Hijos de narcotraficantes hablan sobre apología al delito en televisión. Cansado de que los jóvenes del mundo vean a su padre como un ejemplo, Sebastián Marroquín, Hijo de Pablo Escobar, pide no mas apología al delito, ya que según él, todas estas series y programas presentan la vida del los delincuentes como una fiesta constante.
Marroquín insiste en que el motivo por el que escribió su libro Escobar mi padre (que fue uno de los más vendidos en español a nivel mundial) fue para que todos entendieran que no es cool ser narcotraficante.
La crítica la hizo principalmente por series como la de Caracol y ahora Netflix, que han alcanzado gran éxito, de hecho, sobre esta última, resaltó varios errores que encontró.
«El problema que yo tengo es con el mensaje dudoso (…) hay muchos lucrándose con lo que para mí es una apología del delito»
William Rodríguez, hijo de Miguel Rodríguez Orejuela, habló sobre En la boca del Lobo de RCN
Otro que también se expresó sobre las narcoseries fue William Rodríguez, hijo de Miguel Rodríguez Orejuela, exintegrante del Cartel de Cali y cuya serie se presenta en este momento en el canal RCN.
«Muchas empresas han glorificado a los narcotraficantes, y esto es muy grave… Mire, una historia de estas para que se relate bien debe mostrar que el crimen no paga, que escoger el camino del narcotráfico no trae nada bueno. Pero en las novelas y series no pasa esto». afirmó William en entrevista con Semana.
De hecho, también fue enfático en decir que lo que se narra en la serie es totalmente falso y que hace parte de una fantasía de quien escribió el libro (que lleva el mismo nombre de la serie) y que los canales se desviaron en su primera intensión de mostrar lo malo de este negocio y pasaron a «mitificar a los narcos».
Las historias deben mostrar que existe un arrepentimiento. Los televidentes, sobre todo los más jóvenes, deben entender que el camino del narcotráfico no trae nada bueno. Que las únicas consecuencias de las malas decisiones son la extradición, la cárcel o la muerte. De lo contrario, lo que se está haciendo con estas historias es mitificar a los narcos.
— Nota del Editor —
Es evidente que los únicos que no han caído en cuenta (o no les importa lo que hacen) son los canales y productoras al replicar las vidas de estos delincuentes en series mal hechas, por cierto, pues muchos son los televidentes que piden a gritos historias originales y no refitos de otros países o adaptaciones de libros – fábulas que más que divertir mal educan.
Necesitamos que nazcan más Bettys, Hasta que la plata nos separe, Allá te espero y producciones originales que valgan la pena.
¡Ah, cierto que estamos en el país del sagrado corazón!